Antiguamente la medicina natural jugaba un papel muy importante en la salud de aquellos hombres y mujeres aquejados de graves dolencias o infecciones que, hoy en día, remediamos gracias a medicamentos y compuestos químicos.
Manzanilla. En infusión posee efectos calmantes, es efectivamente digestiva, estimula el apetito y combate las irritaciones tanto en la garganta como en ojos y piel. Hay que tener encuenta que está contraindicada en casos de diarreas.
Aloe vera. Al abrir sus hojas en canal, descubrimos una especie de gel viscoso; ante todo es un excelenteantiinflamatorio y cicatrizante, el mejor calmante para las quemaduras. Recomendado en tratamientos de soriasis y erupciones en la piel.
Menta. Las infusiones de menta favorecen la digestión de comidas pesadas y grasas. Los baños de vapor descongestionan y producen sensación de bienestar cuando estamos inmersos en procesos gripales o catarrales.
Rosas. El agua obtenida después de hervir sus pétalos, es un tónico estupendo que nos deja una piel suave y limpia.
Malvas. Su infusión combate el estreñimiento, es diurética, está recomendada para calmar las anginas y estimula las defensas siendo esto, beneficioso para nuestro cuerpo.
Hay que recordar que al mínimo síntoma de malestar, es obligatorio acudir a su centro médico más próximo y tratar el tema, principalmente con un especialista. Este tipo de medicina natural es conveniente que sea revisado por un profesional.